martes, 7 de junio de 2016

Asilah

Asilah tiene ese embrujo indescriptible y caótico de las medinas alocadas y, además, el mar. Un cóctel que funciona de lujo donde merece la pena perderse en dos direcciones, bien bordeando el mar siguiendo el rastro de sus disuasorias murallas o bien renunciando a cualquier GPS por las finísimas calles de su casco histórico flanqueadas por casas coloridas. Así se llega a sus poderosas puertas como la de Bab Homar o la del Mar y también a palacios rehabilitados para la causa cultural como El Rasuini o la torre portuguesa.

Chefchaouen

Es un ciudad típica andaluza, de casas blancas con tonos añiles, que se encuentra en la montaña del Rif occidental, a 100 Km. de Ceuta. Es uno de los puntos turísticos más atractivos del norte de Marruecos, un lugar único en el mundo y que ofrece una serie de estampas pintorescas de extraordinaria belleza.
Es también denominada como la ciudad azul.


 

Moulay Idriss

Esta ciudad santa está acostumbrada a recibir visitas. Desde su fundación, su principal reclamo fue el santuario de la dinastía Idris, primeros colonizadores musulmanes de Marruecos. Pero al margen de esta mezquita (cerrada para aquel que no sea musulmán), Moulay es toda una belleza gracias a las callejuelas que pueblan el monte Zerhoun y que hacen del paseo toda una experiencia ratonera en la que se descubren vistas, tiendecitas de colores y monumentos sorprendentes como el minarete redondo, un ejemplar único en el mundo musulmán. Y para el que se canse de su ajetreo siempre le quedará Volubilis, el yacimiento romano mejor conservado del norte de África. 

Marrakech

Una de las ciudades más importantes de Marruecos. Actualmente es enorme el turismo que mueve esta gran ciudad. Cuenta con infinidad de lugares turísticos que no podemos dejar de visitar, entre ellos destacan los Zocos, las mezquitas, especialmente la Mezquita de Koutoubia, la Plaza Jamaa el Fna, la Menara y La Medina. El mejor momento para visitar la mayoría de estos lugares es el atardecer, ya que suele dejar estampas preciosas.

Casablanca

Como era esperable, Casablanca cuenta con un gran número de lugares turísticos que deberíamos visitar si estamos en esta maravillosa ciudad. Una de las más visitadas por turistas, gracias a su fácil acceso, tanto en barco como en avión, sumados los lugares de interés turístico que ofrece, como la famosa Mezquita, la Antigua Medina, y la Nueva Medina de la ciudad... más otros muchos lugares preciosos que bien merecen una visita.

Rabat


Rabat es una ciudad Real, que estuvo y estará por siempre llena de historia, esta ciudad en el siglo XII era capital del Imperio Almohade, y actualmente es la capital de Marruecos. Es una ciudad llena de autenticas bellezas que el paso de los siglos fue acumulando, muchas de ellas son lugar de visita obligada si estamos por Rabat. Buen ejemplo de ello son la majestuosa Torre Hassan, el Mausoleo Mohamed V, la Medina de Rabat, la Medina de Salé, El Museo Arqueológico, La Alcazaba de los Oudayas o la Necrópolis de Chellah. Merece destacarse un paseo por sus exuberantes patios, sus floridos jardines y sus tranquilas playas de arena rubia.


Fez

La historia de la ciudad de Fez se remonta al siglo VIII, por lo que cuenta con numerosos monumentos y edificios representativos muy importantes que hemos de visitar. Es la primera de las cuatro ciudades Imperiales de Marruecos. Además Fez de ser conocida como el centro cultural, religioso más importante del país. Si vas a Fez encontraras lugares y puntos de interés imprescindibles de visitar, entre los cuales se  destacan sus mezquitas, como la Mezquita de Karaouiyine y la Mezquita de los Andaluces, la Medersa Bou Inania, la preciosa Medina y su tradicional artesanal.

Tanger

Es un destino turístico habitual, prácticamente es la ciudad más visitada por los turistas, esto se debe a que  es sin lugar a dudas la puerta principal por la que los visitantes europeos acceden a este país misterioso. Tanger tiene un  estupendo clima, que la envidia de muchas ciudades del país, él cual nos dejará disfrutar de de lugares de interés durante todo el año. Una vez en Tanger no podemos dejar de visitar lugares simbólicos y conocidos como: su preciosa Medina, el Gran Zoco, la Mezquita Sidi Bou Abid o la Bahía de Tanger.

lunes, 6 de junio de 2016

Costa de Tánger

Las playas de la costa atlántica (las que miran al oeste) son amplias, de arena fina color claro, con escasas rocas y con fuerte oleaje, por lo que hay que tener precaución en el baño, aunque ideales para los surfistas. En las épocas de baño cuentan con vigilancia.
Ideales para contemplar la puesta de sol.
El Toubkal es la cumbre de mayor altitud de la cordillera del Gran Atlas de Marruecos, y de todo el norte de África. 
Desde la cumbre la vista sobre los otros cuatromiles que lo rodean es magnífica.Es uno de los pocos picos del país en el que se puede encontrar nieve, que cubre su cima la mayor parte del año.
Cada año, cientos de expediciones intentar subir esta montaña, que está situada a algo más de 60 km de Marrakech, y que es una de las principales atracciones turísticas de la zona.

Plaza de Jamaa el Fna

La Plaza de Jamaa el Fna es la plaza central de Marrakech y el lugar más importante de la medina. En ella se desarrolla la vida pública de Marrakech tanto de día como de noche.
Lo mejor de la Plaza de Jamaa el Fna es la transformación que va sufriendo en el transcurso del día.
 Cualquier hora es buena para pasear por Jamaa el Fna y disfrutaréis recorriéndola a diferentes horas.
La plaza está rodeada de tiendas de suvenires, bares y restaurantes. Os recomendamos que entréis a alguno de los bares que cuentan con terraza. Tomarse una consumición por 10 dirhams y ver la vida de la plaza desde las alturas es algo obligatorio

viernes, 3 de junio de 2016

La Torre Hassan

La Torre Hassan, también conocida como la Tour Hassan, es un minarete de una mequita que quedó incompleta en Rabat, capital de Marruecos. Este lugar es uno de los símbolos más representativos de esta ciudad, tanto por su altura por lo que representa, porque se suponía que sería la torre de este tipo de templos más grande de todo el mundo, aunque si tiene un tamaño considerable.

Mausoleo de Moulay Ismail

 esta ubicado en Medina(Meknes) en el lado opuesto de la plaza  Hedim, es el lugar de descanso final de uno de los más famosos Sultánes de Marruecos y es uno de los tres santuarios marroquíes junto con la tumba de la Universidad Mohamed V de Rabat y la Medersa Bou Inania en Fez, que pueden ser visitados por los no musulmanes.


Estudios cinematográficos

Ouarzazate es conocida también como el «Hollywood de África», pues se encuentran en sus inmediaciones varios estudios donde se han rodado películas de fama universal como Lawrence de Arabia, La joya del Nilo, La momia, Gladiator, el príncipe de Persia... Se encuentran en la carretera de Ouarzazate a Ait Ben Haddou, y cuando no se está rodando ninguna película se pueden visitar pagando una entrada de 50 dirhams, unos 5 euros.

El Palmeral de Skoura

En un entorno fundamentalmente ocre y árido, el Palmeral de Skoura supone un sorprendente brochazo de verdor en el bajo valle del Dadès. Con el M'Goum del Alto Atlas al fondo, más de 700.000 palmeras datileras y algunos olivos, higueras, almendros y granados se extienden a lo largo de una amplia llanura en la confluencia de los ríos Hajaj y Madrí, que a su vez van a parar al Dadès. Es como un inmenso oasis con milagrosos regueros de agua que corren por los huertos en un intrincado entramado de acequias y canales alrededor de impresionantes kasbas que parecen salidas de un cuento al estilo de «Las mil y una noches».

Los Casares

es un conjunto de casas que no llegan a formar una ciudad pero sí un pueblo fortificado con una muralla en los que llegaron a vivir de forma continuada hasta 3.000 personas. Simplificando podríamos decir que la kasba es una casa unifamiliar de cierto nivel (chalet exento), mientras que el casar es un pueblo que puede contener varias kasbas, mezquita con su alminar, escuela (madraza), baños públicos (hammam), mercado o zoco (suk)...


Las Kasbas

Las kasbas son edificios de adobe y barro coronado por cuatro torres defensivas almenadas, una en cada esquina. Es la construcción más habitual en la zona y desde lejos asemeja perfectamente a un castillo medieval, aunque la mayoría, tal y como las vemos hoy, datan del siglo XIX. Generalmente tienen un patio central y han sido las viviendas típicas de las familias bereberes de clase acomodada.
El valle del Dadès se conoce como el «Camino de las mil kasbahs». Una ruta de unos 170 kilómetros que va desde Ouarzazate hasta Tineghir, salpicada por kasbas de varios tamaños que los bereberes construyeron para protegerse de los invasores.